Vancouver, Columbia Británica, recibió a la Sexta Asamblea en 1983 en la costa Oeste de Canadá. Se experimentó un énfasis renovado en el culto común bajo la gran carpa blanca que se elevaba ante el sol del verano. La esperanza de una comunidad más cercana surgió del diálogo sobre el documento Bautismo, Eucaristía y Ministerio (BEM), y de experimentos ecuménicos tales como la Liturgia de Lima. Al mismo tiempo, la amenaza nuclear y el neocolonialismo aparecían cual nubes negras en el horizonte. La Asamblea proclamó su tema: "Jesucristo, Vida del Mundo", y llevó a cabo su trabajo en los siguientes grupos:
1. Dar testimonio en un mundo dividido
2. Fomentar la unidad por medio de actos concretos
3. Desarrollar la participación
4. La vida en comunidad: curar y compartir
5. Hacer frente a las amenazas a la paz y la supervivencia
6. Luchar por la justicia y la dignidad humana
7. Aprender en comunidad
8. Comunicar con convicción